Todos tenemos ciertos ideales que pueden yacer adormecidos en nuestra consciencia Estos ideales, normas, modelos absolutamente perfectos, pueden haber sido forjados por nosotros mismos, construidos por medio del estudio, el análisis, la experiencia y la divina inspiración, durante semanas, meses, años o encarnaciones. Consciente o inconscientemente, podemos ampliarlos, modificarlos, perfeccionarlos y hacer más maravillosos a esos ideales que creemos que son infinitos, supremos.
Los ideales que tenemos pueden pertenecer también a un número infinito de cosas, de estados, experiencias, sonidos, visiones, sensaciones, etc. En la música, nuestro ideal consciente oinconsciente puede ser cierto grupo o acorde de notas, un compás o dos, un trozo, o un aria completa. En el arte, nuestro ideal puede ser cierta combinación de colores o cierto color en sus diversos matices, o ciertas líneas y curvas encierta yuxtaposición. En el carácter, nuestro ideal puede ser el que contenga ciertos rasgos, hábitos, maneras y cualidades bien desarrolladas, mientras carece de otras. En la belleza de un rostro, de una figura, nuestro ideal puede tener ciertas facciones, cierto color de piel, ciertos ojos y cabello, altura, peso, gracia, etc.
Es cuando entramos en contacto con uno de nuestros ideales, o cuando tenemos consciencia de él, que tenemos la comprensión de lo que es nuestro ideal, y esta comprensión incita o estimula la emoción que llamamos AMOR y esa emoción se dirige hacia ese ideal y así decimos que lo amamos. El amor de un hombre por una mujer se debe a su comprensión consciente de ciertos ideales que están en ella o en torno a ella, y él la ama nopor ella misma sino por aquellas cosas que están en ella o en torno a ella, que son las que él ama.
El deseo de alcanzarla se debe al deseo de alcanzar, de tener siempre acceso a la comprensión, a la representación de los ideales de él. El crecimiento del amor de un hombre por una mujer depende igualmente de una comprensión continua o nueva de ciertos ideales, o del descubrimiento de nuevos ideales en ella o en torno a ella. Inversamente, el debilitamiento del amor entre un hombre y una mujer está en proporción con ciertos ideales, presentes en un tiempo, y luego eliminados o modificados.
Y así, ahí está nuestro amor a Dios y a la humanidad, y por encima de todo, el amor de Dios por nosotros. "En el principio era el Verbo y el Verbo estaba conDios y el Verbo era Dios".
Eli
2 comentarios:
Amo a la mujer por ella misma, expresandose tal cual es y no por que represente un ideal, disiento de lo que mencionas.
Raben
Hola Raben, te doy la bienvenida al Blog y te doy las gracias por tu opinión que es completamente respetable para mi. Claro que hay diversos tipos de amor y diversas maneras de manifestarlo, si en el post se pone enfasis al amor espiritual, aquel que no ve las cualidades externas ni los rezgos de la personalidad sino el amor impersonal, el cual es de otro tipo.
Eli
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